Where am I go? When everything’s false?
I’m a savior no more. I’m a savior no more.
Where am I go? I’m a savior no more.
I’m a savior no more. That’s why I’m hiding.

No sé qué estás esperando de mí,
no sé por qué yo sigo aquí, por qué sigo así.
Por qué digo ser tan malo cuando no lo soy,
por qué me miento, en fin.
Pero si algo sé es que es tiempo de escapar,
a ver si puedo irme por las ramas, nena,
yo no quiero fama ni beber vino en una bañera,
quiero volver a dónde estaba, a ser lo que no era,
y regresar cual hijo pródigo que ahora ser prodigio pasó de moda
y partes de mi alma como esta nadie se lo espera.
Brotha’ yo sé lo que soy
no necesito una explicación pa’ todo aquello que estoy haciendo.
Perdería el sentido, no sé si me estoy entendiendo.
No necesito de nada, solo dame una birra,
que la amargura de la luna me atrape cuando quiera,
que ser efímero caduco hace tiempo.
Que ser abstemio ya es historia, una quimera,
y que lo único que perdura por acá es el viento.
Por eso cualquiera vive tanto como yo, parce,
estoy atrapado entre el “no sé qué”
el “no sé cuánto” y el “no sé quién”
y es que no sé quién soy hoy
si sé que soy distinto al de mañana, hom’.
Pero sigo sin saber.

I’m still being beaten like that,
like that track you hear it right now,
like the sunset shining my back,
‘cause I’m never gonna go back,
because I’m really fucked up,
but a promise you I’m totally fine.
I’m still being a dumbass, but also,
I’m workin’ with no rest, can you feel it somehow?
Well, fuck it, actually I don’t give a damn,
‘cause I know that I’m gonna probably fall in that trash… again.

Y de todo lo que busco y busqué,
poco encontré, pero fuck it,
estoy en el terreno y,
aunque no me sienta como nuevo puedo seguir caminando.
Me ha ganado el placer de conocerme, nena,
no de conocerte, o conocer tu pasarela
y ni en la más grata agonía decido quedarme, veras.
De veras las veredas me han comentado más
de lo que temo, más de lo que era
y de lo que seré si dejo que mi mente desespere
y sé que a veces desespera, pero, espera,
no hay otra vuelta para esa abeja que de miel en miel
como dijo aquel va buscando consuelo más que marearse.
Más que amarse, cuando no le queda nada que saborear.
A mí me acompañan mis desolados ratos,
mis despreocupados gastos, mi amado gato
y no necesito a alguien me corte las letras,
que me explique que me quiere ver triunfar
cuando le temo al triunfo,
¿pero quién soy yo para criticar sus idas y venidas
si yo fui a ganar y por haber perdido me oculto?

¿Pero quién soy yo para criticar tus idas y venidas
si yo me contradigo y me ofusco?

¿Pero quién soy yo para amar tu sonrisa y tus caricias
si por miedo a amarte te odio y me busco?